
Aumentando nuestro catálogo de especies
El mar estaba malo pal norte así que tomamos rumbo a Las Eras para ver si volvíamos a ver nuestro super camarón «tellei» pero esta vez no aparecería aunque sí muchos muchos bichitos nuevos para este fotosub.
El mar estaba malo pal norte así que tomamos rumbo a Las Eras para ver si volvíamos a ver nuestro super camarón «tellei» pero esta vez no aparecería aunque sí muchos muchos bichitos nuevos para este fotosub.
Crónica de la inmersión en Las Eras en la que obtuvimos nuestro inimaginable primer puesto. Pero qué bueno eres Adrián!
Ese mismo lunes la Federación Canarias había cambiado el lugar de la tercera prueba del Insular de Fotografía a Las Eras. Una noticia terrible, pues llevábamos tiempo entrenando en Los Silos y era un escenario muy favorable para nosotros. Pero bueno, al mal tiempo buena cara y tocaba entonces entrenar en Las Eras a buscar bichitos bonitos para entrenar para la competición que sería el día siguiente.
Hoy tocaba día de playa así que tras un poco de arena y sol en la ventosa playita de Las Eras, nos enfundamos los trajes y «pal agua».
Había que entrenar para la siguiente prueba del campeonato pero como el mar no acompañaba en Los Silos, tiramos a Las Eras que siempre es garantía para ver cosas bonitas.
El mono era demasiado como para tener que esperar hasta el fin de semana así que, aprovechando la tranquila que estaba la mar y que no iba a durar mucho, nos decidimos a hacer una nocturna en el muellito de Garachico.
Estaba terminando de pasar el temporal que acababa de azotar la isla y, para asegurar, decidimos tirar para el Sur: Las Eras es siempre una inmersión de reserva «de Lujo».
Dos inmersiones muy tranquilas, sobretodo la segunda donde no sobrepasamos los 9m. Había que probar técnicas de iluminación con el flamante Flash z240 que le habían regalado a Mundi por su cumpleaños
No se confundan, no se trata de ninguna recién inaugurada casa de masajes en el sur sino que, para los que llevamos el sano vicio del buceo en la sangre, ésta ha sido una de esas «para recordar» por lo muchísimo que hemos disfrutado.
El mar seguía «malo pero que mu malo pal norte», así que optamos por lo seguro y tiramos hacia el Sur en busca de mar en calma y un poco de sol para Charitilla.
Un viernes santo y el mar en el norte de la isla seguía siendo un auténtico «via crucis» así que volvimos a tirar para Las Eras. Otra vez nos sorprendió con un montón de vida. Esta inmersión no tiene desperdicio.
Con el estómago ya calmado decidimos hacernos una inmersión sencillita en la Pared del Porís. Queríamos ver al pez rubio pero no lo vimos; en vez nos topamos con un «angelote fantasma» (el pobrecito había pasado a mejor vida muy recientemente).