Llegada a El Hierro y primera inmersión en el Roque de Bonanza
Han sido 9 días de absoluta felicidad así que antes de nada: Gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, Adrián por esa invitación a bucear en «tu isla» que, con permiso, también hice mía. Todo el que ha buceado aquí sabe que El Hierro es garantía de buenas inmersiones, mucha vida submarina y espléndidos paisajes tanto en el mar como en tierra, pero… cuando uno viaja con un «Bimbache» como Adrián, oriundo de La Restinga, descubre lo más importante y auténtico de esta isla; a sus gentes.