Alberto, Javi y yo quedamos en vernos en Las Eras, el plan; una inmersión allí y la segunda en El Porís. Ya acercándonos a Las Eras se veía que el mar estaba movido, movido, tanto que los tres intrépidos lobos de mar decidimos una «retirada a tiempo» y pasamos de la inmersión en Las Eras para hacer sólo la del Porís. En el muellito del Porís el mar tampoco acompañaba mucho, pero ya había que mojarse… Bastante movimiento de reflujo y muchísima polución (cosa extraña en esta zona). Nada más bajar, se nos cruzó un caballito al que no le dedicamos muchas fotos pensando que, como de cstumbre, veríamos más ejemplares a lo largo del resto de inmersión: ni uno más, y eso que estuvimos más de 100 minutos en el agua.
Lo mejor de la inmersión fue ya al final cuando pudimos ver a dos bancos, uno de bicudas y otro de palometas, cazando gueldes cerca de la superficie…